La vida es todo un dirio vivir, todo un diario luchar pero...

                                                                                                                                                                La vida es un diario luchar. Pero… por este motivo no podemos tirar la toalla, como hacen los manager de los boxeadores, cuando ven que su pupilo esta Vencido, de cansancio. cuantas veces tal vez e escuchado de personas que han predicado de su palabra, hasta han llegado a decir de sus propios labios que nada los podrá separar del amor de Dio, pero de repente les cae un desanimo espiritual. Y no es que les estoy jusgando no, amigo hermano pero me pregunto… ¿Que paso con aquellas palabras tan hermosas que tanto se había pronunciado? En muchas ocasiones tomamos decisiones erróneas para después lamentarnos por toda una eternidad. Les digo es tan difícil retornar al camino, después de avernos alejado, pero: Jehová en su gran misericordia nos puede ayudar a retornar. “Que Dios tenga misericordia”. Saben escuchaba de una joven que se sentía avergonzada de su madre porque aquella mujer tenia las manos quemadas y parte de su cuerpo. Esta joven su hija, no quería salir a ningún lado con su pobre madre quemada de las manos y el cuerpo. Pero ella su hija no sabia la verdadera historia de esas quemaduras en el cuerpo, de su madre. Le cuento más. Un día ellas fueron al supermercado. al llegar , a la caja de pagos esta joven tan avergonzada de las quemaduras de su madre, se alejó de ese lugar para que no vieran que ella era su hija. Un día la madre desesperada, y hastiada de las locuras de la muchacha, la llamo a: capitulo y le dijo: hija ¿porque te avergüenzas de tu madre? La niña le dijo el porque. la madre le dijo: ven que te  voy  a contar el porque de estas quemaduras. Un día estaba en casa recién, parida fui a la cocina a preparar unos alimentos pero se me olvido una pequeña toalla sobre la estufa.
La casa se encendió porque me quede un poco dormida, dándote el seno pero, desperté con la casa prendida en llamas. Te tome en mis brazos y Salí corriendo por en medio de ellas. Ese es el resultado de estas quemaduras, que ves hoy, y te avergüenzas. La joven se tiro de rodillas ante su madre, y le pidió perdón una y mil beses y cambio de parecer. Que MI GRAN SEÑOR TE CUBRA, SIEMPRE. TE QUIERO. ATT: ISIDRO HILTON