Una noticia publicada recientemente por los periódicos italianos generó mucha polémica. En el mes de julio de 2016, en un monasterio de monjas de Milán, fueron acogidos cinco refugiados del Norte de África.
Al principio, las hermanas superiores creyeron estar haciendo caridad inspiradas por la gracia de Dios, ayudando a los hombres perseguidos en sus países de origen.
Todo iba muy bien, hasta que las intenciones originales fueron extrapoladas, pues según el Giornale Italiano, nueve jóvenes monjas aparecieron embarazadas. La Madre Superiora Abadessa, cuya madre anciana estaba gravemente enferma, dejaba el monasterio durante la noche, aunque debía permanecer en el recinto para controlar a las novicias, detalla la noticia de la publicación italiana.
Posiblemente, las hermanas más jóvenes aprovecharon la situación, pasando noches con los refugiados después de las oraciones del día. Pero después de 6 meses, las barrigas crecieron. Las religiosas fueron obligadas a hacer la prueba de embarazo y, después de comprobación, tuvieron que abandonar la vida monástica.
Las hermanas, sin embargo, aseguran que no han tenido relaciones sexuales con los refugiados. “Nosotros no hicimos nada mal, estos sufrimientos necesitaban amor y consuelo, María también se quedó embarazada, permaneciendo virgen, y la inocencia de María es sabida tanto por Madre Abadesa como por nosotros. Recibimos el mismo milagro, no hay otra explicación. Agradecemos a Dios por eso.Según las religiosas, tal situación es la prueba de que, si María volviese hoy a nuestro medio, muchos hombres que se dicen piadosos y religiosos no creerían en su virginidad y dirían que ella ha hecho cosas pecaminosas.
Diversión con las hermanas
Pero uno de los refugiados hizo el siguiente relato sobre el incidente: “La gente se divertía con las hermanas y vamos a aconsejar este lugar a todos nuestros amigos, gracias, hermanas, gracias, Italia.”
Fuente: Sobral 24 Horas