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domingo, 12 de diciembre de 2010

Un árido desierto saturado de espejismos.

                                                                                                                                       El mundo, tal y como lo conocemos, es un árido desierto saturado de espejismos…
Todo lo que ves es inconsistente y pasajero…
Hoy es, pero mañana deja de ser…
Todo pasa…
TODO.
Piénsalo, no te dejes llevar por lo que te dictan los sentidos aunque así lo consideres...
Eso que ves, es una ilusión nada mas.
Una ilusión que no permanecerá.

Nada permanece, solamente Dios. ... Ver más
Sin embargo, a pesar de saber esta verdad irrefutable, somos propensos a olvidarlo.
Fácilmente perdemos la noción de la realidad de Dios, de su presencia activa a favor nuestro y de nuestra naturaleza espiritual.
Nos dejamos impresionar por lo que en realidad NO ES...

Si bien es cierto que estamos condicionados por nuestros sentidos, hemos de recordar que hay realidades aun mas allá de las que estamos acostumbrados a percibir...
El hecho que no logremos alcanzarlas por los medios naturales, no quiere decir que no sean reales...
Dios, el creador del universo es REAL... se hizo hombre en Jesucristo para que al conocer su palabra le conociéramos a el, para que practiquemos sus lineamientos con espontaneidad y para que conozcamos, el plan que tiene para cada uno de nosotros los seres humanos.  Tenemos su Palabra revelada para que la conozcamos y nos nutramos de ella, por medio de su estudio y reflexión.

Tienes la Palabra de Dios, la fuente única de toda verdad.
Estúdiala y reflexiona,  con la asistencia del Espíritu Santo. Para que tus ojos sean abiertos.
Necesitas ver más allá de todo espejismo.  Más  allá  de  lo  natural.
Cuan importante es el DISCERNIMIENTO sobrenatural para entenderla.
La CONVICCION  firme aunque su contenido vaya mas allá de toda lógica mental.


NO TE DEJES IMPRESIONAR,  POR  LAS  FALSAS  VANIDADES   DE  ESTE  MUNDO.  MIRA  QUE  TE  DIGO: NO VALE LA PENA.
TE  Quiero.  Y…  recuerda,  estas  palabras  verdaderas:

Engañoso es el corazón mas que todas las cosas y perverso...
Jeremías 17:9